“Aunque siempre fui de pensamiento de Izquierda, debido a mi afiliación cristiano-evangélica siempre fui reservado para externar mis pensamientos políticos, dado que por siglos los cristianos habíamos vinculado la actividad política con el diablo; pero algunos años de trabajo evangelizador en comunidades pobres en Ilopango y el estudio del enfoque social del cristianismo propuesto por varios autores cristianos, me llevaron a la convicción de que por medio de la política podía convertirme en un agente de cambio”.